Facebook y Twitter han sido parte de las campañas de redes sociales de muchas marcas este año, pero varias se desilusionaron al ver que no llegaban a ningún lado.
- Hacerle caso a los que se denominan expertos del social media. Este tipo de mercadotecnia digital tiene poco tiempo de vida, por lo que nadie es realmente experto. Dejarle la responsabilidad a una persona que cree que lo es, puede ser un error. En las redes sociales hay que experimentar, probar y medir para ir viendo lo que le funciona a cada marca.
- Asumir que todo vendrá por sí solo. Muchas marcas creen que las campañas en redes sociales no necesitan soporte de los medios tradicionales para promocionarlas, pero este tipo de mercadotecnia no se trata de abrir un Twitter y ya.
- No relacionar la campaña con algo en la vida offline. Así como en los comerciales el target tiene que identificarse con el producto, los fans o followers deben sentirse identificados con la marca.
- Y el error más grave de todos es No llevar a cabo una investigación previa. Al igual que las marcas, no todas las redes sociales son iguales, por lo que cada compañía debe conocer su público y conocerse a sí misma para poder planear una estrategia online adecuada
- No permitir que todos los empleados participen. Debemos recordar que se trata de una campaña de social media, por lo que se requiere de la interacción de unos con otros y, en este medio de prueba-error, cualquier idea puede ser muy buena.
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